viernes, 6 de abril de 2007

VaCaCiOnEs

Si, estamos en Semana Santa, tiempo de devotos, de penitencias absurdas, de procesiones multitudinarias. Pero más allá de todo esto, cada cual tiene que darle su propio significado. Pues más allá de todo lo religioso, es un buen momento para estar con aquellos que quieres, de dar un abrazo a personas que no veías desde hace tiempo, de reir con tus amigos, de pasar momentos entrañables, de agotar tus últimas fuerzas, de llorar viendo una película o escuchando una canción, de pensar en lo que de verdad te importa, de conocer personas nuevas, de enamorarte, de estar viendo la tele hasta que se te cierren los párpados, de conocer partes del mundo que desconocías, o algo tan simple como dar un paseo por tu ciudad, de recordar viejos momentos como la infancia, momentos en los que paseabas de la mano de tus padres, momentos en los que descubrías el mundo mirando siempre hacia arriba, hacia el cielo, recordar como tu padre te daba las buenas noches o como llorabas por conseguir un juguete. Del modo que sea no tienes escusa para lucir tu mejor sonrisa.

La línea recta

¿ Vamos todos en busca de lo fácil, de evitar los sobresaltos, los sustos y las sorpresas? Pues si, tristemente eso es lo cierto, todos intentamos trazar la línea recta en nuestra vida, nadie va en busca de una carretera virada, sinuosa, llena de percances, de obstáculos, de adversidades. Lo que provoca una incesante monotonía, pues hoy en día ya no hay nadie que nos sorprenda, que nos congele las arterias, que haga aumentar la tensión. Pues enseguida vamos en busqueda de estabilidad, de paz, de calma, de pactos. Pues en cuanto conocemos a alguien en quien se puede confiar enseguida buscamos lazos de unión hacia esa misma persona, somos tan cobardes que nos puede el miedo a perder lo que ahora tenemos, es decir, nunca cerramos los ojos y damos un paso o dejarnos caer simplemente, todo tiene que estar medido, todos somos iguales, nadie puede ser lúcido, diferente, particular. Lo más frustrante es cuando eres consciente de todo lo que sucede y tratas de coger un boli, dibujar las curvas más salvajes, las más centrífugas, rápidamente una chica busca compromiso, la vida nos exige responsabilidad, la sociedad te hecha en cara la falta de moral, y pocas personas son los bastante fuertes para no reducirse a ser débiles. En tu mano está la oportunidad de atreverte a deslizar un bolígrafo